El 7,8 por ciento no era esperado por los analistas del mercado, que estimaban un 9,0 por ciento de mínima, incluso algunos proyectaban un índice de dos dígitos. La estabilidad cambiaria y las menores remarcaciones en el rubro Alimentos y Bebidas, con un 5,8 por ciento, concluyeron en una desaceleración de la tasa de inflación luego de cinco meses consecutivos de alzas.